Mis consejos para crear un MENSAJE ESTRATÉGICO

A lo largo de 15 años de experiencia tuve el privilegio de asesorar a profesionales, candidatos políticos, equipos de ventas y marcas personales en el ámbito de la comunicación.

 Formé parte del equipo ganador en una campaña electoral en El Salvador, contribuyendo al posicionamiento exitoso de dos fuerzas políticas adicionales en el mismo país.

Además, con ese gran equipo anamos el prestigioso premio Napolitans Victory Awards a la Mejor Estrategia Digital en campaña —un reconocimiento internacional considerado el «Oscar» de la consultoría política— donde el mensaje estratégico fue clave para conectar con el electorado, movilizar votantes y asegurar la victoria.

¿Por qué te cuento esto? Porque si hay algo que he aprendido es que un mensaje sin estrategia no tiene impacto. Ya sea en política, ventas o marcas personales, comunicar sin un plan claro es como gritar en un estadio vacío: nadie te escucha.

En este artículo, te guiaré paso a paso por cómo crear un mensaje estratégico poderoso, evitando errores comunes —como hablar sin saber a quién te diriges o lanzar mensajes sin estrategia— y, lo más importante, compartiendo ejemplos reales que harán que cada concepto sea fácil de entender y aplicar.

La comunicación estratégica es el proceso consciente y planificado de diseñar, gestionar y difundir mensajes que están alineados con objetivos específicos, ya sea para fortalecer una marca, vender un producto o ganar una elección.

No es hablar por hablar; es comunicar con intención.

Para entenderlo mejor, pensá en esto:

Caso real: Durante la campaña electoral en El Salvador, no nos limitamos a decir: «Este candidato es la mejor opción». Diseñamos un mensaje estratégico que apelaba a las emociones y preocupaciones del electorado: «Juntos somos más +». 

Este no solo era un mensaje verbal, contenía un mensaje simbólico. La particularidad de esta campaña era que se competía contra una fuerza electoral nacional “Nuevas ideas” el partido representado en la figura del actual presidente Nayid Bukele, y lo hacíamos con mínimos recursos. 

Este contexto agudizó el ingenio del equipo y este mensaje permitió incluir a todas las personas que no estuvieran de acuerdo o sintieran que no estaban siendo representadas por el oficialismo. 

Ese signo + ayudaba a impulsar el mensaje.

Además, con el correr de la campaña, pudimos detectar una frase muy utilizada en ese contexto: “Primero Dios…”,  este simple detalle activó la conexión entre el candidato y la ciudadanía haciendo mella en los mensajes de redes sociales.

No solo se transmitía una propuesta, sino que tocaba fibras sensibles del público objetivo: la frustración, el deseo de cambio y pertenecer a un espacio (en este caso una coalición -dos partidos políticos unidos-), que los representara.

Un mensaje dentro de una estrategia responde a tres preguntas clave:

• ¿Qué quiero lograr con este mensaje? (Ejemplo: ganar votantes indecisos)
• ¿A quién va dirigido? (Ejemplo: jóvenes descontentos con el sistema)
• ¿Cómo quiero que reaccione mi audiencia? (Ejemplo: que participen activamente en la campaña)

Conclusión: Sin una comunicación estratégica clara, tus mensajes serán ruido de fondo.

Un mensaje estratégico es el núcleo de tu comunicación. No es solo lo que decís, sino cómo lo decís para influir, inspirar y movilizar a tu audiencia.

Tiene cuatro características esenciales:

• Claridad: Un mensaje confuso es un mensaje muerto.
• Relevancia: Si no conecta con las preocupaciones de tu público, será ignorado.
• Consistencia: La repetición crea recordación.
• Diferenciación: Debe destacar por qué sos único.

Ejemplo real: Al asesorar a un equipo de ventas que ofrecía software financiero, transformamos su mensaje de:

“Ofrecemos soluciones tecnológicas para tu negocio” (genérico y aburrido)

a:

“Automatizá tu contabilidad y ahorra hasta un 40% de tiempo cada mes” (específico y emocional)

El cambio fue abismal: el mensaje ahora tenía impacto tangible y hablaba directamente del beneficio clave para el cliente.

Conclusión: Un mensaje estratégico no vende productos ni candidatos; vende soluciones y emociones.

Uno de los errores más frecuentes que veo es hablar sin saber a quién.

Un mensaje estratégico se adapta según el público; un mensaje sin estrategia lanza palabras al aire, esperando que alguien las atrape.

Ejemplo práctico: Imaginá que asesoras a una marca de cosmética.

• Si tu audiencia son adolescentes: tu mensaje podría ser: “Despedite del acné con fórmulas naturales y cruelty-free”.

• Si tu público son mujeres de 40+ años: el mensaje cambia a: “Recupera la firmeza de tu piel con ingredientes clínicamente probados”.

El problema viene cuando alguien dice algo como: “Tenemos productos para todas las edades”.

Resultado: nadie se siente identificado.

Conclusión: Hablar sin un público definido es hablar para nadie.

A lo largo de los años, utilicé un método simple y efectivo para crear mensajes estratégicos:

1. Definí tu objetivo claro

¿Qué esperas lograr? Ventas, captar leads, ganar credibilidad… Sé directo.

Ejemplo: En la campaña política, nuestro objetivo inicial fue movilizar votantes indecisos y descontentos. Todo el mensaje giró alrededor de las dificultades que no estaban resueltas por el oficialismo: empleo, infraestructura y educación.

2. Conocé a tu audiencia como a vos mismo

Hacete estas preguntas:

• ¿Qué les duele?
• ¿Qué sueñan?
• ¿Dónde consumen información?

Ejemplo: En una estrategia para una consultora financiera, descubrimos que sus clientes temían perder dinero. ¿El mensaje clave? “Protegé cada centavo de tu inversión conociendo los movimientos que realizamos en nuestra app y en tiempo real”.

3. Crea una propuesta de valor poderosa

¿Por qué alguien debería elegirte a vos? ¿Qué te hace diferente a otros en tu rubro o profesión?

Ejemplo: “Ayudamos a emprendedores a aumentar sus ventas en un 50% en 90 días, sin gastar más en publicidad”.

4. Usa un lenguaje simple, directo y emocional

Los mensajes complicados confunden; los simples conectan.

Ejemplo: En una campaña política, pasamos de: 

“Implementaremos una política educativa inclusiva” 

a:

 “Garantizaremos becas para cada estudiante de bajos recursos”.

5. Mantén la coherencia en todos tus canales

Redes sociales, web, discursos: mismo mensaje, distintas versiones adaptadas.

Errores comunes al crear mensajes sin estrategia

Después de asesorar muchas de marcas y campañas políticas, estos son los fallos más comunes:

• No tener claro el público: Mensajes ambiguos no conectan.
• Ser genérico: Si decís lo mismo que todos, desaparecés.
• Incoherencia: Un mensaje diferente en cada canal confunde.
• No medir resultados: Si no medís, no mejorás.

Ejemplo real: Un cliente usaba en redes sociales “El mejor software para tu empresa” y en su web “Soluciones tecnológicas avanzadas”. 

Unificamos su mensaje a: “Automatiza y crece: el software financiero hecho para tu negocio”.

Resultado: mayor engagement y claridad de marca.

La comunicación estratégica motor de crecimiento 

Si algo quiero que recuerdes es esto:

Un mensaje sin estrategia es ruido. Un mensaje estratégico es influencia.

Tu misión no es solo vender un producto, ganar una elección o captar seguidores. Es crear un mensaje que toque las emociones correctas, en las personas correctas, para obtener resultados reales.

Ya lo viví en campañas políticas ganadoras, en marcas que dispararon sus ventas y en negocios que pasaron de ser ignorados a convertirse en líderes.

La diferencia siempre estuvo en una cosa: la fuerza de su mensaje estratégico.

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¿Querés  profundizar en cómo construir un discurso que conecte? Lee este artículo:  Cómo Estructurar un Discurso en 3 Pasos